Confusión: hay que desaparecer la represión, no la evaluación.
El martes pasado, los diputados de Morena presentaron en la Cámara de Diputados un punto de acuerdo para exhortar a las autoridades educativas a suspender la evaluación a los docentes derivada de la Reforma Educativa, y creo que eso muestra la ignorancia de nuestros representantes en el tema más importante del país, que es la educación pública.
Coincido en que los maestros no debieron haber sido reprimidos en base a una evaluación sin primero darles oportunidad de fortalecer sus conocimientos pedagógicos.
Yo propuse, muchas veces, que primero había que crear universidades normales regionales, preparar y actualizar al magisterio y después llevar a cabo la evaluación, basada en análisis de resultados, para corregir los errores y ratificar los aciertos y no la represión de poder quitarles el salario a cerca de dos millones de mexicanos.
Sin embargo, ahora quieren desaparecer todos los avances que hubo en la llamada Reforma Educativa, que coincido no fue la adecuada, pero empezar con borrón y cuenta nueva quitando, por ejemplo, el Instituto para la Evaluación de la Educación es un absurdo. Conserven eso y retiren todo lo que tiene que ver con la represión financiera del magisterio.
Coincido en la alegría de muchos mexicanos por una nueva esperanza, pero el poder implica no solo el derecho, sino también la responsabilidad, y los diputados ahora están perdiendo la oportunidad de dar un buen ejemplo y están arrasando con una idea fundamental, que es la de cambiar y mejorar la educación.
Descartes: Pienso, luego existo… Los diputados confunden la gimnasia con la magnesia, pero con éstos tenemos que arar. ¡Ni modo!
