En su carácter de coordinador de la Comisión de la Juventud del Instituto de Estudios Políticos, Económicos y Sociales del PRI, el autor elaboró este documento, durante la campaña presidencial del licenciado Carlos Salinas de Gortari. Señala que el concepto de juventud en una nación de jóvenes como es la nuestra, desborda, por su importancia, la propia definición cronológica del mismo, porque cuando se habla de jóvenes no se piensa sólo en la edad de éstos, sino en los estados renovadores del espíritu y en la vital transformación de una sociedad, que la juventud produce.
Considera clave para el futuro la participación política de los jóvenes, porque la juventud es la conciencia de un país, ya que no tiene ataduras imperativas y presenta una opción de cambio sin intereses creados, y con la generosidad y la entrega que caracteriza la edad de las ilusiones. Por lo anterior –concluye- el reclamo de los jóvenes en el quehacer político de la nación debe ser estimulado bajo las fórmulas democráticas y sin actitudes copulares y paternalistas que, se ha demostrado, son inoperantes y enajenan la creatividad que está inmersa en el espíritu juvenil.
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