Apolítico sin compromiso: tecnócrata
Al margen de poderme equivocar, este candidato del PRI sufre de un problema muy serio: la falta de definición política previa, que aparentemente es una ventaja, porque el PRI está en caída libre por los antecedentes de corrupción previa, de sus miembros.
Es un hombre aparentemente bueno, con poco carisma, pero que ha tenido muchos puestos públicos sin haberse enriquecido. Sin embargo, su actitud pasiva ha permitido, o al menos no se ha dado cuenta, de que dentro de sus responsabilidades también estaba cuidar las acciones de los que dependían de él.
Tiene el apoyo de un partido político que sabe ganar elecciones. Además, que es el candidato del Presidente actual, que en nuestra historia siempre ha sido el dedo que señala el siguiente Presidente o candidato; actitud que se rompió en la época de Zedillo, cuando entregó la Presidencia al PAN y solo logró un pensamiento colectivo de que el PRI y el PAN actúan en forma semejante, ajenos a los intereses mayoritarios de la nación.
Por supuesto que tiene oportunidades, a pesar de que va muy mal en las encuestas, porque el PRI tiene infraestructura electoral y seduce financieramente al electorado el día de la elección. Sus debilidades son fundamentalmente su formación tecnocrática, pues la historia nos enseña que los tecnócratas que han ocupado el gobierno no han resuelto los problemas de pobreza, marginación, violencia, inseguridad e impunidad.
La moneda está en el aire, y la diferencia entre debilidades y fortalezas se sentirá en la respuesta del electorado.
Descartes: Pienso, luego existo… Yo me pregunto si la bondad, acompañada de la tecnocracia, resuelven la problemática social de una nación.
https://www.milenio.com/opinion/luis-eugenio-todd/ciencia-politica/2-jose-antonio-meade-kuribrena
