Aquí en Monterrey no habría pleito
Hace algunos días encontré en Facebook la propuesta de un joven que se dedica a la música y que ahora es Presidente de Conarte, y que yo no sé de dónde sacó o él inventó esta interesante, creativa idea de ofrecer a empresarios y gobierno que el aeropuerto internacional que tanto se requiere en México se haga aprovechando lo existente en los aeropuertos de Monterrey.
Esta generosa propuesta y no ocurrencia, porque puede hacerse, me recordó a importantes aeropuertos de Nueva York, Washington, París y otros países, en donde confluyen vuelos internacionales y se propicia un gran desarrollo comercial e industrial, así como generación de empleos, lo que es benéfico para todos.
Yo no soy experto en aeronáutica y no sé si se podrá hacer, pero lo que sí sé es que nuestro suelo no está sujeto a incertidumbre como el del lago de Texcoco, ni tampoco a daño ambiental porque esta zona, en algunas áreas, es semidesértica.
Pero lo que sí conozco es que aquí hay empresarios con muchos recursos y relaciones, así como capacidad y prestigio a nivel internacional, por nuestras empresas y nuestro acervo educativo, ampliado recientemente en lo cultural por Natividad González Parás.
Por todo lo anterior, esta idea puede ser factible si actuamos todos juntos y a tiempo, y les recordamos a los habitantes de la Ciudad de México que el nombre de México no representa una ciudad centralizadora solamente, sino que es un gran país y que Monterrey y su área metropolitana representan grandes oportunidades, con experiencia fecunda en el trabajo, acervo educativo de primer mundo y gran capacidad emprendedora. Además, nuestra cercanía geográfica con el mayor mercado del mundo nos da cierta jerarquía en el comercio internacional.
Espero que alguien que esté en ese mundo de la inversión lea lo anterior, y aunque provenga de un joven que está en el mundo poco reconocido de la cultura, no lo desairen de inmediato, sino que lo estudien a fondo y, sin las ocurrencias que caracterizan al México actual, propongan lo factible.
Descartes: Pienso, luego existo… México no es una ciudad, es también un gran país, y Monterrey es una gran ciudad. Hay que proponer el reto con consulta o sin ella.
