Está gobernando para el siglo XX
No dudo que el presidente de la república es un hombre bien intencionado, con deseos de poder normales, y honestidad personal. Además su tenacidad, que no debe convertirse en tozudez, puede ser una virtud, así como su liderazgo en la comunicación, aunque cuidando de que esta última, como es diaria, no aburra y produzca fastidio social.
De lo que estoy preocupado es que a diferencia de Luis Echeverría, en los años 70 del siglo pasado, que no era un hombre muy letrado, ni preparado en muchos temas, se rodeó de jóvenes inteligentes y expertos en temas como economía, sociología y energía, y así pudo equilibrar algunos de sus desaciertos, con un régimen de cierta estabilidad y proyección social.
Sin embargo, AMLO se olvidaque está en el siglo XXI y que ésta es una sociedad del conocimiento; que la ciencia está transformando el medio ambiente y que la globalización nos obliga a interactuar con otras naciones. Además, la cibernética y la comunicación a tiempo real son factores diferentes a los del siglo XX.
En lugar de rodearse de jóvenes; un ingeniero civil, que fue director en la UNAM hace más de 45 años, responde las preguntas sobre el absurdo que fue cancelar una obra, perder dinerodel país y así bajar los bonos y también el valor de las afores, cuando podía haberse hecho una auditoría para corregir errores y ofrecérsela a la iniciativa privada.
También, en muchas de sus declaraciones se olvida que sus enemigos están afuera del país, en el mundo financiero y que poner un personaje en Pemex, que no conoce y que según expertos no tiene ni idea del tema de la energía, genera que organizaciones internacionales,de mucho prestigio,devalúen su capacidad de crédito y él, en lugar de buscar ayuda, da una respuesta agresiva a organismos que influyenen la opinión financiera internacional.
Basta recordar que un solo movimiento absurdo en el Senado tumbó la Bolsa Mexicana de Valores en un día y nos empujó al riesgo de la devaluación, que si bien se ha conservado la moneda estable, porque el secretario de Hacienda parece una gente racional, el mismo no puede con los caprichos de muchos funcionarios que no le dicen la verdad al presidente y que no lo apoyan tecnológica y científicamente en sus decisiones.
Es importantísimo que alguien que lo aprecie, le sacuda un poco esta falta de realismo histórico y, aprovechando sus virtudes, que sí tiene, corrija los defectos y pueda defender a nuestro país, adaptándolo a la sociedad nueva que él nunca vivió y que sus colaboradores, usando la dialéctica, lo contradigan y lo convenzan.
DESCARTES: Pienso, luego existo…Las conferencias diarias de prensa producen fastidio y exposición innecesaria.
https://www.milenio.com/opinion/luis-eugenio-todd/ciencia-politica/incongruencia-historica
