March 28, 2024

Continúa el lío del aeropuerto (NAIM)

No entienden razones; la ciencia manda

De nuevo aparece el fantasma bueno, pero muy ocurrente, de la “opinión a la carrera” de un tema técnico-científico que se quiere hacer político y resolver por consenso popular. Me refiero al nuevo aero-puerto que requiere la Ciudad de México.

En estos días AMLO consultará al pueblo; no se sabe si a todo o a una parte estadísticamente significativa, o solo a aquellos que se hayan subido a un avión, pues según él, los que nos hemos subido ya aprendimos a conocer aspectos meteorológicos, climatológicos, geofísicos, de estructura y financieros que se requieren para construir una estructura de esa envergadura.

Al principio nuestro Presidente electo estaba convencido de borrarlo, después le dijo a Slim que hiciera el aeropuerto con dinero propio; luego les dijo a los empresarios que lo iba a pensar. Después le encargó a un hombre de edad avanzada, buen maestro de la UNAM, futuro Secretario de Comunicaciones, que lo consultara y él lo consultó con la Asociación de Ingenieros, quienes dieron una opinión diferente a la del Presidente electo.

Posteriormente reviró y le dijo a los empresarios que continuaba la consulta y el Secretario futuro se olvidó de la consulta del MIT y de nuevo señaló que la nueva forma de hacer política era consultar al pueblo y se va a hacer la consulta, no estadísticamente significativa; sin que sepamos a quién se le va a preguntar y por supuesto que la respuesta característica del pueblo mexicano y la contradicción, que nace de nuestra etnología, hará que la mayoría vote porque no continúe la construcción, pues la hizo el malo, el saliente presidente Peña Nieto. Todo esto generará una algarabía de triunfo y una derrota a la ciencia.

Yo pienso y reitero que el Presidente electo está actuando de buena fe, pero que está politizando mucho los temas técnicos, igual que lo hizo con el tren maya y con el petróleo y también con el fracking y por qué no decirlo, con la descentralización que planea y la reducción de salarios a personal técnico muy capaz, que va a huir del gobierno.

Para el que esto escribe la solución es muy sencilla y práctica, y es ésta: continúe con el aeropuerto que inició Peña Nieto y solo revise los contratos y haga una convocatoria abierta para que el resto de la construcción se haga en forma privada y en esa forma el gobierno no gaste dinero.

https://www.milenio.com/opinion/luis-eugenio-todd/ciencia-politica/continua-el-lio-del-aeropuerto-naim