Primera causa de muerte en jóvenes
Luis Eugenio Todd
Insisto en esta temática porque la discusión sobre el tema de las fotomultas me ha llevado a recordar a un viejo servidor público de la Secretaría de Salud que tuvo como obsesión, durante muchos años, tratar de evitar la muerte de jóvenes en los accidentes viales. Este personaje, cuyo nombre no recuerdo, tenía innumerables datos que demostraban que ese tema no está a discusión y que cualquier programa que impida la velocidad en las calles o carreteras puede reducir significativamente la inútil muerte de jóvenes y el dolor de miles de familias.
Está documentado hasta la saciedad; por eso no entiendo por qué algunos medios siguen atacando las fotomultas. Uno de cada cuatro accidentes viales es debido a la velocidad excesiva; a esto se le agrega el alcohol y recientemente el uso del celular y se fortalece cualquier proyecto que impida estas caprichosas actitudes, que terminan con muchas vidas humanas o dejan invalidez permanente.
En países ejemplares, como Suecia, se han estudiado con mucho cuidado estos datos y se asegura que a 30 km/h un choque tiene la posibilidad de ser mortal en un 10%; arriba de 50 aumenta a 80% esa posibilidad y sobrevivir a un accidente a más de 120 km/h es casi imposible, debido a que a esa velocidades se reducen todos los medios modernos y formulas de seguridad que existen en la actualidad.
Para evitar lo anterior, países en Sudamérica, América del Norte, Europa Oriental y Occidental, Australia y Oceanía tienen límites a la velocidad porque la relación de visión-frenado y accidente está bien documentada y en casi todas estas naciones hay un sistema de fotomultas para alertar, cuidar y hacer responsables a aquellos que se juegan, no solo su vida, sino la de los demás; todo eso en su locura subconsciente que les hace, en forma criminal, llevar en su carro una pistola de muerte vial que salpica niños, jóvenes y adultos y deja lesiones del núcleo familiar e invalideces en de miles de seres humanos.
Por supuesto que insistimos en que las fotomultas tienen que hacerse bajo un régimen de transparencia , legalidad y derecho de replica a tiempo. Concluyo estas aclaraciones señalando que por favor, los medios no confundan la corrupción con la seguridad y no generen tantas dudas e incertidumbres que lesionan la ya muy débil confianza del pueblo hacia sus gobiernos.
